Eran los años que conformaban la década de 1.960 – 1.970, donde los estudiantes de Enseñanza Primaria y Secundaria (en establecimientos públicos y privados) se aprestaban durante 20 días de Noviembre a realizar sus exámenes finales. Pruebas escritas, que mediante cuestionarios de lo aprendido durante todo un año el alumno debía responder y demostrar su aprovechamiento escolar.
Pasados estos días, los que aprobaban el 6°, algunos optaban su Título de Bachiller en ceremonia especial. Los demás pasaban al año siguiente o repetían condicionalmente. Se apreciaba un centralismo administrativo del Ministerio de Educación Nacional, porque los mismos títulos de bachilleres debían ser refrendados en Bogotá, con la firma y sello del mismo Ministro de Educación. Esto se daba todavía en 1.959
Invitado Alberto Fernández, Bovea y sus Vallenatos en «Ya voy hacia ti».